Cada noventa años, doce dioses regresan como jóvenes. Los aman. Los odian. En dos años, mueren todos. Está ocurriendo ahora. Está volviendo a suceder.
Kieron Gillen, Jamie McKelvie y Matthew Wilson (Phonogram, Jóvenes Vengadores) continúan su fantasía moderna en la que los dioses son las estrellas del pop definitivas y las estrellas del pop son los dioses definitivos.